Mac and Cheese

Es un plato cuyo origen se lo atribuyen muchos paices, Entre ellos están Estados Unidos, Canadá, Francia, Reino Unido e Italia,
Pero hay muchas pistas que apuntan a los Alpes, lo que hace posible que su origen se pueda rastrear hasta Suiza. 


Se componen de macarrones y salsa de queso. Tradicionalmente se emplea cheddar (o queso procesado parecido al cheddar), aunque pueden emplearse otras variedades. De igual forma, pueden usarse otros tipos de pasta, a pesar de lo cual conserva el nombre.
En su preparación de forma casera, se suele preparar el queso como si fuera una salsa mornay, con mantequilla y queso cocinada en un roux (mezcla de manteca y harina). La textura final de esta salsa de queso debe ser similar a una crema.

Les voy a ser muy sincero, yo no sabía de este plato hasta que lo comimos por primera vez en el Hard Rock de Barcelona, y venían acompañados de una pechuga de pollo, y estaban muy cremosos y sabrosos y extremadamente ricos!
Me gustaron tanto que los volví a pedir en París, y, para mi gran disgusto estaban muy, pero muy picantes así que realmente no los pude disfrutar! pero me quede con la idea del primer sabor...

En casa los prepare ya muchas veces, no tan picantes, solo los Mac & Cheese sin el pollo, con jamón, y alguna variante más.

Estoy convencido que el gran secreto es que los macarrones sean realmente de muy buena calidad, y eso se complica, porque no en todos los mercados hay. Si encontramos los coditos, que son parecidos, pero tienen media vuelta menos, jejeje...
Yo compro unos de marca italiana.



Ingredientes para 4 personas

500 grs. de macarrones.
350 grs. de queso cheddar rallado.
100 grs. de queso cremoso.
50 grs de manteca.
50 cl de leche o crema de leche
1 cucharada sopera de mostaza Dijon
2 cucharadas soperas de harina
2 cucharadas de sal (cuchara de café)

Preparación 

  1. En una sartén grande, calienta 50g de mantequilla a fuego medio.
  2. Cuando la mantequilla comience a deshacerse añade la harina y remueve sin parar hasta conseguir una buena mezcla.
  3. Ahora añade la leche o crema de leche sin parar de remover.
  4. Después incorpora la mostaza y la sal y continua removiendo durante 5 minutos hasta conseguir una mezcla espesa y cremosa al mismo tiempo.
  5. Finalmente, añade los quesos rallado hasta que la mezcla quede bien homogénea.
  6. Cuece los macarrones en agua salada siguiendo las instrucciones de la bolsa de pasta (para dejarlos a tu gusto) y precalienta el horno a 180º.
  7. Escúrrelos después de pasarles un poco de agua fría para quitarle el almidón.
  8. Esparce los macarrones en una fuente de barro o  termica y vierte la salsa y mézclalos delicadamente con una cuchara de madera para que la salsa quede bien repartida (podes añadir panceta o jamón o champiñones salteados previamente en la sartén)

 

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